Confesión.

El hacer conciente que el que te enamores de mi ya no de pende de mi, me mató.
Ya tu amor no depende de lo que yo entregue, ni lo que haga por ti, ni de cuanto te quiera, solo depende de quo yo coincida con tu ideal de mujer perfecta.
Me encantaría ser yo esa mujer que tu te imaginas… si me la digieras incluso seria capaz de transformarme, pero te estarías enamorando de una mentira, que de un tiempo a otro estallaría, haciendo más daño, que el que nos causamos no estando juntos.
Yo solo quiero protegerte y verte feliz, razón alguna no la sé,
ya que hoy siento no logro recordar tu rostro, pero sí tu corazón.
Me has hecho tan feliz, y siento que yo a ti te he echo mucho bien,.
pero aun así con todo lo que te provoco, te he echo creer y cuidado, sigo sin ser yo con quien tu sueñes e imagines. Aunque no lo creas, me conoces mucho mejor que yo misma.
Pero si eso no te conforta, simplemente ya no me queda nada por hacer. Y no se porque extraña razón me encantaría ser yo quien conquiste tu corazón.
Pero ya llegara el día en que aparezca esa mujer perfecta, tal como tu apareciste en mi vida, quizás con ella puedas vivir sin tener que enseñarle nada, te de más confianza para cumplir tus sueños, aunque no la confianza para contarles tus miedos, ahí estaré yo, dispuesta a entregarte todo, para quitar todas las astillas de tu corazón y hacerte reír. Aunque después camines con ese ser que amas al lado, que fue capaz de dominar tu sentir, y tus impulsos, quien delimite tu territorio encargándose de tus perfectos ideales; que es quizás lo mismo que yo quiero para ti, pero que extrañamente no me dejas hacer, y quizás la culpa no es tuya, es de los dos, y quizás tanto mía.
Te pediría perdón por no ser esa que tu sueñas, pero se que tu tampoco me lo recibirías, buscas a alguien que tenga confianza en si misma y que crea en ella, esos son mis mayores defectos y que junto a ti creía estar solucionando, incluso hoy veo que junto a ti, logro aprender….
Algo no me permitió alejarme de ti una vez separados y agradezco por eso, tenemos pequeños rituales secretos que vivimos, día a día y necesitamos de ellos para sentirnos bien, nos guardamos un cariño inmenso y una preocupación más grande, me echas de menos tanto como yo a ti,.
Me haces mucho más bien que mal, y necesito de ti tanto como tu de mi, ahora puedo hablar segura de tus sentimientos, entre frases y susurros nos lo hemos confesado todo, y nos hace mucho más dependiente el uno del otro, pero a la vez, le tememos más a ese juego del amor. .
Si uno de los dos desaparece, no se que pasaría. Simplemente nos acostumbramos a esta sinceridad. Solo estuvimos un mes juntos y nos ha costado tanto separarnos, sí temo volverte a ver y que no me entregues ese abrazo que tanto sueño, déjame unir tu corazón a tu cuerpo y tu forma de ser.
Si lo haces mi corazón será tuyo, y el tuyo, de tu ideal.